Si ya sabes que tienes riesgo de padecer COVID-19 grave y notas que algunos síntomas aparecen – como fiebre, tos, dolor de cabeza, fatiga, dolor de garganta, congestión, moqueo, etc. – activa tu plan de inmediato y contacta a tu médico para realizar la prueba de COVID-19.7
Enfermar de COVID-19 puede ser abrumador. Es comprensible que, ante un diagnóstico positivo, te sientas preocupado, asustado o decepcionado. Contar con un plan de acción personalizado con anterioridad es una gran herramienta para atravesar ese momento. Ya sabes, si tienes factores de riesgo para COVID-19 severo y te preparaste para este momento, estás listo para actuar de inmediato. Habla con tu médico sobre los pasos a seguir para evitar que avance a grave.3,6
Tu médico es la persona a quien recurrir para resolver esta situación. Él tendrá en consideración tus factores de riesgo alto, junto con tu historia clínica y los medicamentos que consumes en la actualidad, para determinar cuál es el tratamiento adecuado para vos. Recuerda que tener riesgo alto significa que el tiempo es esencial: dado que los síntomas leves pueden tornarse graves rápidamente, es importante actuar rápido1.